En España, se podrían instalar 100.000 pequeños molinos de viento, según los productores
ANTONIO CERRILLO | Barcelona | 01/07/2010 | Actualizada a las 21:27h |
En España, se podrían instalar hasta un total de 100.000 pequeños aerogeneradores hasta el año 2020, según las estimaciones de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA). Los cálculos se han hecho a partir de las previsiones incluidas en el borrador del Plan de Acción Nacional de Energías Renovables (Paner) 2010-2020, elaborado por el Gobierno.
Este documento oficial de planificación energética abre por primera vez la puerta a un sistema de regulació y retributivo específico para la energía minieólica, lo que permitirá el desarrollo de esta tecnología en España, según ha indicó Francisco Javier Forte, presidente de la sección minieólica de APPA. El objetivo de esta asociación es impulsar en España los pequeños molinos de viento. Este tipo de instalaciones, prácticamente inéditos hasta ahora en nuestro país, se pueden colocar sobre el tejado de una casa sin dañar la cimentación y no serían más altos que la antena de telefonía móvil. Mientras que los grandes aerogeneradores puede medir 120 metros y tener palas de 90 metros, en este caso se trata de molinos de viento muy reducidos que pueden medir de unos tres metros de media.
El borrador del Paner reserva concretamente 370 MW como objetivos específico para la eólica de pequeña potencia, por lo cual APPA considera que el cumplimiento de estos objetivos permitiría la implantación de 100.000 pequeñas instalaciones de energía minieólica en España durante la próxima década, dado que la potencia media que estas instalaciones se sitúa en 3,7 kW, según demuestran los ritmos de venta en los mercados de Gran Bretaña o Estados Unidos, en donde estos sistemas están teniendo más éxito.
APPA destaca que España cuenta con un gran potencial. Existen diversas empresas españolas bien posicionadas y capacitadas para el lanzamiento de la tecnología minieólica (y que podrían instalar aerogeneradores con potencia menor a los 100 kW). Hasta ahora, las instalaciones minieólicas en España son aisladas (no están conectadas a la red) y son utilizadas para electrificar entornos sin conexión a la red. En cambio, lo que se persigue es que estos pequeños molinos se puedan conectar a la red de baja tensión. El planteamiento que estén en el mismo lugar de consumo, que puedan servir de autoabastecimiento o para aportar a la red energía sobrante.
"La tecnología minieólica es ideal para dotar de electricidad a zonas aisladas pero, con una correcta regulación que vincule la producción al consumo, se puede promover la conexión a red; así se obtendría una microgeneración distribuida, lo que comporta ahorros en el transporte y distribución de energçia", ha comentado Francisco Javier Forte, responsable del área de APPA. La propuesta de APPA persigue también que los promotores obtengan un tipo de prima para poder garantizar el desembolso de la inversión y su amortización en un período de unos diez años, lo que comportaría una prima de unos 20 céntimos por kilovatio hora producido. Uno de los pequeños molinos comercializables en España, de 1,7 kW de potencia, tiene un coste de 6.000 euros, y produciría unos 3.200 kilovatios hora al año, lo que equivale al consumo de una familia, según indica Beñat Sanz, técnico de APPA. No obstante, para facilitar su impulso se requiere la ayuda del sistema eléctrico. El Paner ha sido elaborado por Ministerio de Industria en respuesta al requerimiento de la UE sobre la planificación energética que desarrollará España para dar cumplimiento al paquete de energía y cambio climático aprobado el año pasado por la Comisión.
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