Si no se actúa contra las larvas se puede producir una eclosión de la plaga, con el consiguiente aumento de las picaduras de los ejemplares adultos
M. MILLAN - 13/04/2010 20:32
La campaña de tratamientos contra la mosca negra en el tramo catalán del río Ebro aún no se ha iniciado y ya acumula cerca de dos meses de retraso. En los últimos años, el Consorcio de Servicios Agroambientales del Baix Ebre y el Montsià (Code) había realizado las primeras prospecciones entre mediados y finales del mes de febrero, pero a estas alturas aún no han recibido el encargo oficial de la Generalitat para iniciar los trabajos, que cuentan con un presupuesto superior a 300.000 euros. El responsable de hacerlo es el Departamento de Salud y concretamente la Agencia de Protección de Salud. El director de la agencia en las Terres de l'Ebre, Miquel Àngel Arasa, explicó ayer en el Diario que ya se ha tramitado el acuerdo de Gobierno necesario y, por tanto, el encargo oficial es inminente. El retraso se debería a cuestiones administrativas, pero podría suponer un contratiempo en la lucha contra esta molesta plaga, si las condiciones meteorológicas y del río en las próximas semanas y meses favorecen la proliferación del insecto.
El año pasado, por el alto caudal del río, el primer tratamiento se tuvo que retrasar hasta el 19 demarcaciones lo que supuso una importante eclosión de moscas negras adultas, responsables de las dolorosas picaduras.
En todo caso, desde Salud se argumenta que las condiciones actuales del Ebro, también con un caudal continuo superior a los 400 metros cúbicos por segundo, impiden realizar los tratamientos. Estos se realizan a lo largo del tramo catalán del río. En unos siete puntos, se lanza en helicóptero un producto, BTI, el mismo que se utiliza contra el mosquito y que ataca las larvas cuando éstas se encuentran depositadas en los macrófitos (plantas acuáticas). Durante todo el año pasado, se tuvo que utilizar 12.500 litros de BTI repartidos en cuatro tratamientos diferentes.
Desde Salud también señala que en estos primeros meses del año es cuando la plaga tiene menor incidencia. Según los datos de la administración, en lo que va de año y hasta el 15 de marzo, los centros de atención primaria han atendido 185 personas por picaduras del insecto, en el conjunto de las cuatro comarcas.
En todo el 2009, el número de personas atendidas llegó a las 3.806, de las que 2.134 eran de la Ribera d'Ebre. Los vecinos de esta comarca, y muy especialmente los campesinos que trabajan cerca del río, son los que dieron la alarma de la aparición de la plaga en el año 2005 y los que más la sufren año tras año.
Más sobre la mosca negra: http://www.biogeociencias.com/08_contaminacion_residuos_impactosambientales/2007/070624_LaMoscaNegra.htm
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